Detallitos de un día cualquiera

Comienza a sentirse el frío. Mes de septiembre. Huele a tierra mojada.

Hoy N., mi agente de Círculo de Lectores ha venido a verme a la oficina; traía mi pedido del pasado mes de julio y una invitación para tomar un café. Me hubiese gustado, salgo poco de estas cuatro paredes, pero tenía trabajo. El libro me ha encantado. En cuanto he tenido un ratillo libre, le he quitado el plástico protector y he empezado a hojearlo, sintiendo el olor a nuevo y fijándome en sus ilustraciones. Se trata de un diario, un libro de collages precioso que Carmen Martín Gaite realizó durante el periodo que vivió en Nueva York. Si puedo, a mediodía subiré a la azotea a recrearme en sus hojas y le haré una foto.

Por otro lado, la semana pasada recibí la lana que estaba esperando. Saqué de Picasa unas muestras de punto calado para empezar la manta, se las llevé a L. para que las viera y me pidió que se las dejara. Volveré a sacarlas hoy y empezaré a tejer como una loca, que se va acercando la fecha y aquí ando de brazos cruzados.

La alegría de la semana, aunque suene absurdo, es que por fin tengo lavadora nueva. ¡Bien! ;)

3 comentarios

[Acuarela - 19 de septiembre de 2008 - 20:27]

Gracias, chicas!!! La lavadora es que me tenía harta, empezó el verano y decidió que nunca más quería centrifugar. No me extraña, si ese modelo ni siquiera lo fabrican ya, no sé los años que tendría la pobre encima, jajaja! La de ahora me tiene loca, casi sale la ropita ya seca. El libro está chulísimo, ya os lo enseñaré :) . Besos!!

[laia - 19 de septiembre de 2008 - 19:30]

Lo de la lavadora a mi también me hubiera alegrado, la mía está rota y estamos esperando que la casera nos la cambie. Ya nos contarás como termina el libro. Besos

[laurix - 18 de septiembre de 2008 - 19:29]

Ese tipo de detalles son los que alegran el dia a cualquiera... y la lavadora es muy muy necesaria :-)